Una duda muy repetida a la hora de tomar café es cuál es el mejor método de infusionar, y nada más lejos de la realidad. Depende completamente de las necesidades y posibilidad de inversión de cada persona.
Si quieres experimentar, será suficiente con una pequeña inversión en un método de filtro o slow coffee, o en una máquina espresso de última generación.
Para ayudarte a elegir uno, hoy te vamos a introducir los métodos de infusión de forma genérica e iremos creando posts para ayudarte a sacar el mayor partido a cada máquina, hasta conseguir el café perfecto.
Cada método de infusión de café es un mundo, pero en todos lo más importante es saber cómo funciona y dar con las medidas perfectas. También te recomendamos que utilices una báscula de precisión (precisión mínima 1 gramo y máxima 1 kg). Esto, por supuesto es durante el proceso de aprendizaje, una vez conozcas tu máquina y tu molino, serás capaz de calcular las medidas a ojo.
Una cosa común en todos los métodos es la importancia de mantener constante la fuerza del café. Primero elige la receta y después ajusta la fuerza, para conseguirlo como a ti te gusta. En general, un milímetro de agua pesa más o menos un gramo, sabiendo esto, con medir el agua y el café podrás mantener esta fuerza. Eso sí, asegúrate de poner el cronómetro en marcha desde el momento en el que el agua cae encima del café molido y cuenta el tiempo hasta que cambie la velocidad del flujo.
Elijas el método que elijas, hay algunos utensilios que son comunes a todos.
Para saber más sobre cada método y las máquinas que hay, sigue nuestras noticias, ¡Te lo contamos!
Fuentes del artículo:
El arte del café – Sébastien Racineux y Chung-Leng tran
¡Al grano! La guía para comprar, preparar y degustar el mejor café – Kim Ossenblok
